Tras la entrevista, en palabras de Iago Eireos …
La isla de Lanzarote me remite en primer lugar a un enclave protegido, único e irrepetible por su identidad, con una gran riqueza natural y cultural, legados que son dignos de cultivar y abanderar, tales referencias me dirige la mirada a un símbolo tan allegado a Lanzarote como lo es la vid y su peculiar viñedo protegido por un murete de piedra volcánica plantados en agujeros de piedra lapilli.
Cada vid resulta en sí misma una isla individual como símbolo de trabajo, dedicación y resistencia ante las adversidades que de seguro son muchas, temperatura sofocante, fuertes vientos, geografía abrupta, en conclusión una vendimia heroica reflejo del espíritu que se respira en la isla.
“Refugios” hace una directa referencia a la identidad de Lanzarote, vid y mar, un refugio de piedra con corazón dulce y caliente, mostrando un muro semicircular de piedra volcánica que guarece de las inclemencias, con foso de piedra lapilli donde emerge el fruto, en esta ocasión azul que emergen y se funden con el paisaje y simbología de Lanzarote.
La lectura de “Refugios” nos dirige a un espacio de serenidad, cobijo y preservación de las raíces, al igual que de sus costumbres y tradiciones, una mirada de respeto y orgullo a espacio natural con un claro mensaje de defensa, amparo del entorno y su identidad.
Et voilà:
